LAS EXIGENCIAS DEL SIGLO XXI Y LA EDUCACIÓN
El potencial sin duda lo tenemos, somos el continente con más jóvenes en el mundo y como bien lo diría Rubén Dario, juventud, "divino tesoro".
Aun, ante este panorama tan alentador, tenemos mucho por hacer, debemos modernizarnos como continente, ser pioneros e innovadores en materia educativa. Hay que trabajar con verdadero interés hacia la consecución de una educación que le permita a nuestros jóvenes encarar con éxito las exigencias de la época.
No sólo la educación primaria debe transformarse, la educación media y la universitaria tendrán que generar cambios significativos en su estructura, no sólo desde el punto de vista presupuestario, que es importante, los cambios han de ser de forma y sobre todo de fondo. Capacitar a nuestros profesionales con maestrías de gran impacto, diplomados y doctorados que trasciendan las teorías y nos lleve como sociedad a una praxis exitosa en el campo tecnológico, científico y cultural.
Las soluciones no caerán del cielo, como sociedad tenemos la obligación de hacer uso de las mejores herramientas para elevar la educación latinoamericana.
El mundo necesita menos políticos con idelogías extremistas y más de aquellos que aportan progreso. Venezuela es una nación que aspira trasncender lo ideológico y caminar por el sendero del progreso y del cambio.
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