¿DIALOGAR U OCULTAR?
LOS NIÑOS Y LA REALIDAD DEL PAÍS
Saber con certeza hasta donde logran los chicos comprender la situación del país es complicado, sobre todo por lo subjetivo de la percepción que tenemos los seres humanos de nuestro entorno.
Lo que si parece claro suponer, como común denominador, es que para niños y grandes la situación de nuestro país ha sido difícil por decirlo menos, sobre todo en el último año.
¿Qué tipo de diálogo se debería establecer con los niños sobre una realidad tan compleja? No creo tener una respuesta concreta, sin embargo, al igual que en otros temas de gran impacto como la sexualidad o las drogas, no se debe guardar silencio, sería un grave error negar una realidad al niño con la excusa de querer protegerlo de la misma.
El niño, como ser social, precisa tener información confiable que puede y debe venir del hogar, que es su entorno más inmediato. La escuela, no obstante, tampoco puede estar de espaldas a lo que la sociedad vive en su día a día.
El dialogo sigue siendo la herramienta más poderosa para aclarar dudas en los más pequeños, eso si, sin explicaciones superfluas, sin manipulaciones. Que sea el propio niño, como individuo el que vaya develando las realidades de su entorno. Al adulto, llámese padre, madre, profesor, le corresponder asumir el rol de facilitador del proceso.
nada mas terrible para un individuo que crecer ignorando la realidad que le circunda
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