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LA ESCLAVITUD MENTAL. La peor de todas




Jamás nos hubiésemos imaginados, ni en la peor de nuestras pesadillas, que nuestro Planeta, nuestro gran hogar, ese pequeño punto azul en el firmamento, nuestra Pachamama, hermosa tierra de gracia abonada con la sangre de tantos próceres y libertadores estuviese hoy día sometida a la peor de todas las esclavitudes: la mental.

La humanidad sufrió y aun hoy, en su modernidad, sigue padeciendo los vestigios de aquella época de esclavitud de la raza negra. No son pocos los documentales que describen los horrores sufridos por millones de hombres y mujeres, sin embargo, hoy día para el asombro de muchos,  el cepo y el grillete como medio de coacción grotesco del siglo pasado han dado paso a otro tipo de "artefacto" para inmovilizar, someter y retener a un ser humano.

Los sistemas de gobierno autoritarios han encontrado un mecanismo mucho más eficaz para el control de las masas: La manipulación, el engaño, el abuso, la represión, la amenaza, el descrédito, la burla, la exclusión, son mecanismos mucho más eficientes  para forzar no sólo a una persona sino a toda una sociedad a hacer cosas en contra de su voluntad.

En los últimos años el mundo ha sido testigo del apartheid en sociedades que históricamente habían sido prósperas y libres en su pensamiento. Lo que está pasando en el mundo es muy complejo, difícil poder describirlo en su justa dimensión. No podemos reducirlo a una simple arista económica y rotularla de "hiperinflación". La crisis a nivel planetario va mucho más allá del ámbito económico.

Se percibe en el ambiente, en cada metro cuadrado, en cada esquina, en cada calle, en cada plaza,  una sumisión, un miedo, un susto, un silencio ensordecedor, una desconfianza que tiene su origen en los mecanismos anteriormente señalados. De allí su probada eficacia. La educación se convierte entonces en ese vaso comunicante entre mente-cuerpo-espíritu para que cada hombre y mujer nacido en esta tierra tenga la capacidad de generar su propia libertad.

No conozco el autor de estas palabras, pero son lapidarias en los tiempos modernos: "La esclavitud mental, es la peor de todas, te crea la ilusión de que eres libre, te hace confiar y defender a tu carcelero. miestras te haces enemigo de aquellos que quieren que seas libres"





 

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